No sé el origen exacto de la historia de esta fiesta, aunque sí conozco el interés del presidente de la asociación de comerciantes por realizar una fiesta romana, al menos desde los carnavales de 2012 en los cuales, disfrazado de romano, mantenía alguna conversación con algún vecino mostrando su interés por que se desarrollara algo así en el barrio. No quiero que se interprete este texto como crítica a los comerciantes, sino más bien contra la forma de hacer algunas cosas que deja la impresión, desde fuera, que hay más fines personales que asociativos en cómo se gestan las cosas. Tampoco pretende ser una crítica contra el Concello o el alcalde, sino contra la imagen que a veces los eventos organizados con mucha «mano de obra gratuita» de comerciantes, vecinos, o voluntarios que colaboran porque les encanta que se hagan cosas aquí acaba siendo endosada a organismos que seguro que hacen una labor importante en la financiación de las actividades, pero que por otro lado forma parte de sus obligaciones al administrar sus fondos que deben volver de una forma u otra a los vecinos.
La perspectiva de hacer esta idea realizable despega con fuerza tras una reunión que el alcalde de Vigo mantiene con representantes de la Asociación de Comerciantes de Navia y de la Asociación de Vecinos Novo Vigo, ambas del PAU de Navia, el pasado 16 de mayo de 2012.
Así publicitaba el Concello el resultado de dicha reunión:
En uno de los puntos que se trataron, pero a los que no se le dió publicidad, desde el Concello se invitó a los colectivos a la organización de una fiesta «patronal» propia del barrio, como las que se celebran en casi todos los barrios de Vigo, ya que había una partida para patrocinar/financiar/subvencionar este tipo de fiesta de barrio y el nuestro, que no tenía por ser de reciente creación, merecía tener una. Ya sabemos que Navia, el barrio de Navia «de toda la vida», tiene su fiesta de San Pelayo, pero aunque hicieron alguna actividad y alguna charanga recorrió las calles del PAU de Navia, el grueso de la fiesta se sigue realizando en la alameda de Navia, y no hay intención ni interés en que esto cambie. Tampoco nosotros los vecinos de la «Urbanización de Navia» tenemos interés en desplazar dicha fiesta tradicional de su ubicación histórica, quede claro.
Pocos días después, el 31 de mayo, se volvieron a reunir representantes de ambas asociaciones en el local del parque de Navia para tratar algunos temas con un asesor del alcalde, también vecino del barrio, y el presidente de la asociación de comerciantes le presentó un dosier encanutillado de unas 30 páginas (lo vi de lejos, ya que no se nos mostró a otros) en las que se documentaba la organización de una fiesta romana. El asesor, que ojeó por encima dicho proyecto preguntó al presidente de los comerciantes por el presupuesto de dicha fiesta ya que no venía detallado de forma alguna, a lo que se le contestó que dependería un poco de lo que se pudiera conseguir. El asesor le indicó que, para saber si desde el Concello se le podía dar apoyo al proyecto, debería incluir claramente el presupuesto y las actividades, ya que así por encima, y en base a su experiencia, este tipo de fiestas eran bastante costosas de organizar. En todo caso, el asesor comentó que lo habitual de este tipo de fiestas era que, o bien se realizara a través de la asociación de vecinos o que, mejor aún, la situación ideal para fomentar este tipo de fiestas sería que se organizara conjuntamente entre las asociaciones de vecinos y de comerciantes pero que la financiación desde el Concello tendría que ser a través de la asociación vecinal.
Desde el primer momento se quiso dejar claro que la realización de la fiesta partía desde la presidencia de la asociación de comerciantes y así se hizo constar desde el primer momento cuando incluso a través de la prensa, el día 4 de junio de 2012, en el Faro de Vigo,
se publicaba una noticia al respecto.
No habían pasado ni 4 días desde el encuentro y ya se estaban moviendo a toda prisa los hilos para darle aire a la fiesta, que algunos no acabamos de entender, porque a pesar de que justifica que en los alrededores del barrio -en la ciudad- hay restos romanos, sea en O Castro o sea en Toralla, lo cierto es que nuestro barrio es precisamente todo lo contrario a lo que se espera de un entorno propicio para este tipo de fiesta, salvo que los muros de piedra del parque, aún sin las esperadas enredaderas, se aprovechen como muros de un castillo o fortaleza. Y en todo caso la apreciación de «convertir Teixugueiras en una villa romana«, parecía aún más anecdótica a la vista de que convertir unas torres de entre 6 y 12 pisos en algo parecido a una villa romana es de lo más complejo que se pueda imaginar.
A todo esto se añadía que la pretensión de hacer la fiesta en agosto iría acompañada de «llegar a un acuerdo con la Escuela Superior de Arte Dramático (ESAD) para hacer representaciones de autores clásicos, como Ovidio o Virgilio«, sabiendo, como sabemos, que en esas fechas las sedes académicas están cerradas por vacaciones y tanto alumnos como profesores pasan el mes disfrutando de su merecido verano.
Aunque la fiesta se habría previsto realizar inicialmente en agosto, los problemas que rompieron la directiva de la asociación vecinal hicieron que el proyecto que se pretendía inicialmente enfocar mediante la colaboración de la asociación vecinal con la asociación de comerciantes tuviera que ser desarrollado íntegramente por esta última.
¿Qué comerciantes son los que organizan la fiesta?
El proyecto presidencialista de los comerciantes fue un éxito de público el sábado, pero el domingo, por motivo de la alerta naranja por temporal, tuvo que ser suspendido. Digo presidencialista porque cuando pregunté por las justificaciones a algunos de los vecinos y comerciantes implicados, todos apuntan al presidente como el principal motor de esta actividad y algunos, entre los que me incluyo, no entendimos bien que en todo momento el nombre del presidente figurara en las noticias en prensa, en el programa de la actividad, y paralelamente se montara la web www.comerciantesnavia.es justo los días previos al evento. Web que se dotaba del contenido que iba apareciendo sobre la fiesta, como la normativa para puestos, recomendaciones sobre vestimentas, solicitud de puesto, formulario para alta de voluntarios, etc… pero sin embargo algo que me llamó poderosamente la atención durante los días previos, y durante los días de la actividad, que es cuando más se consultan estas webs e informaciones, fue que no pudiéramos conocer quiénes eran exactamente los comercios asociados que daban soporte y cobertura a todo este evento… aún a día de hoy, más de un mes después de la finalización de la fiesta, el listado de los asociados, esos empresarios y profesionales que forman parte de la misma y que le dan sentido, está como «En Construcción… Próximamente». De hecho el 23/10 se reclasificó toda la información de la web, se trasladaron los contenidos a un Evento «Vicus Spacorum» y casi todas las secciones de la web empezaron a mostrar el texto y la imagen «En Construcción».
Posteriormente, sobre el 26 de Octubre se le dió un cambio de imagen nuevo y se eliminaron todas las informaciones existentes previamente. Seguro que a partir de este momento, quizás en unas horas subsanen este gran fallo de haber quitado la información y, sobre todo, pongan la lista de comercios adheridos, que es lo que queremos conocer aquellos vecinos que nos gusta premiar en la medida de nuestras posibilidades a quienes ponen de su parte para que todos recibamos. En el momento de publicar este artículo lo único que se puede ver es lo que contempláis aquí, una vista general de la Calle Teixugueiras, y nada más….
Es curioso ver que en la web aparecía hasta un mes después, hasta el día 23 de octubre, «Colabora Concello de Vigo» (inicialmente ponía «Alcaldía» pero lo modificaron al día siguiente) que entiendo que colabora con la fiesta, pero puesto así en la web parece que colabora con la web o con la asociación de comerciantes… el Concello debió hacer una buena e importante aportación a la web de los comerciantes cuando figuraba en lugar relevante mientras que quienes llevan meses como miembros de pleno derecho de la asociación siendo socios, pagando sus cuotas, participando en la asociación, no tienen ni un mísero espacio que los mencione, un plano que los ubique o una página que les presente. Eso sí, a todos los puestos, que cada uno de ellos pagaron religiosamente sus 40 euros, se les obligó a colocar un cartel de «Concello de Vigo» que tampoco lo entendí, porque si te dan un puesto gratis entiendo que el patrocinador se anuncie en tu espacio, pero si eres tú el que te lo pagas, ¿Por qué tienes que ceder parte del espacio que tienes a publicitar a quien no colabora con tu puesto? Supongo que es otra de esas ideas curiosas de cómo organizar una fiesta que no encajan en mi esquema particular. Y no, este cartel no era algo que viniera en las normas que había que cumplir, sino algo que surgió sobre la marcha. A estas alturas entenderéis que mi razonamiento me llega a pensar que la fiesta la organizó el Concello de Vigo en vez de los comerciantes y muchos vecinos del barrio que se implicaron en dicha fiesta… ¿Y por qué no hubo los mismos carteles y del mismo tamaño que incluyeran el logotipo de la Asociación de Comerciantes y que dejara bien claro que la fiesta estaba organizada por la «Asociación de Comerciantes del PAU de Navia»? ¿Por qué no poner unos estandartes en los accesos con la lista de comercios o incluso repartir un mapa del barrio a los visitantes con información de los tipos de comercios, ubicaciones y ofertas especiales con motivo de la fiesta? ¿Por qué no unos «pergaminos» con cupones de descuento que pudiéramos utilizar «a posteriori» ya que todo el tiempo se echó encima y no pudo ser «a priori»? Si es que, al parecer, y me lo dice algún comerciante, ni siquiera el DJ animador comentó a lo largo del día informaciones sobre la asociación, los comercios, las ofertas, o similares…
Si algunos comercios han sido mencionados en la web de los comerciantes son las peluquerías asociadas, el día justo antes de la fiesta, para una promoción a quienes se quisieran peinar y maquillar de romanas, una iniciativa estupenda que llegó tarde, sin promoción y desaprovechada en general. La oferta de los «cafés» Spacorum y algunas «promociones Spacorum» también pasaron por encima de todo, también en las horas previas al evento, cuando al menos una semana hubiera sido el mínimo deseable para promocionar este tipo de ofertas que beneficiarían a comerciantes y vecinos.
Es a veces tan difícil para un visitante, o en general cualquiera no relacionado directamente con el evento, saber quién organiza dicho evento que en los días que rondaron la fiesta hubo picos de visitas en las webs de asociaciones vecinales del barrio buscando información y preguntando sobre el evento.
Tampoco entendimos algunos el porqué se hacía la fiesta en la Calle Pedra Seixa, retirada del centro del barrio… aunque algunos suponemos que es para no molestar por la noche a la vista de la existencia de la orquesta que amenizó la verbena y que estaba programada hasta altas horas pero que la lluvia deslució el final de la noche precipitando la huída de la mayor parte de los que nos encontrábamos a pie de orquesta. Como algunos vecinos se habían quejado de las atracciones que se habían puesto durante unas semanas en el centro del barrio, organizado por la asociación de comerciantes, por el ruido que generaban, entendimos algunos que era una forma de no tener que dar explicaciones por los ruidos de la música y la gente.
No obstante sitio había en el barrio para haber instalado puestos a lo largo y ancho, ya que se podía inutilizar uno de los sentidos de la circulación en uno o más tramos del barrio y abrir ahí el barrio a la fiesta, siendo además más indicado para dar beneficios a los comercios de hostelería instalados en la vía principal, Teixugueiras, y para animar el barrio ya que alguno seguro que no se enteró que hubo fiesta.
Era curioso que otra de las normas que surgió a posteriori, sobre la marcha, era que los puestos que vendían no podían realizar la venta de refrescos y en general bebidas embotelladas, limitándose la venta a algunos artesanos vinos, cervezas, y licores, y reservándose la organización todos los derechos sobre la venta de las bebidas embotelladas más comunes, que algunos artesanos tuvieron que llevar de vuelta a casa al recoger. Los comerciantes habrían adquirido 15.000 unidades que optaron a vender a razón de 1 euro cada una, idea que ya funcionó muy bien durante la fiesta de la hoguera de San Juan que organizó la Asociación de Vecinos de Novo Vigo. La previsión de venta se habría cumplido de no haber fallado el domingo el tiempo.
Algunos de los puestos que participaron pidieron que se les reembolsara parte o la mitad de la aportación de 40 euros que hicieron para los dos días por no haber podido trabajar el segundo, pero la organización decidió que no se reembolsaba esta parte al suspenderse por causas de fuerza mayor ajenas a la organización. Algún responsable de algún puesto se quejaba de que la mañana del domingo, mientras iban a por la furgoneta para retirar el puesto, les habían desaparecido parte del puesto (no recuerdo si quizás unos tablones).
Por último, relacionado con el tema de la comunicación web y redes sociales, mencionar el
evento oficial creado en Facebook para la ocasión, que fue creado por uno de los comercios en vez de hacerlo desde una página propia de la Asociación, que hubiera podido ser gestionada por un Community Manager «anónimo», que hubiera dado un poco de relevancia a la misma, en vez de ser comerciantes a título particular los que gestionaran dicho evento en su nombre, con publicidad propia y en detrimento de los demás asociados. Porque una página de Facebook no cuesta dinero ni casi tiempo crearla, y porque serviría para unificar todo lo que ha sido, es, y será, lo que desde la Asociación de Comerciantes se haga, que hubiera sido un momento perfecto para hacerse con unos cientos de seguidores, inicialmente por la fiesta, pero que se quedarían ahí apuntados y a los que hoy en día, desde dicha página, se les podría seguir informando de lo que se cuece comercialmente en el barrio, las promociones, etc. Al menos la página del evento es interesante porque es de los pocos lugares donde podemos encontrar comentarios, fotos, preguntas y respuestas, y que muestra el gran alcance que tuvo el evento en la red social donde más de 500 personas confirmaron su asistencia, 428 se plantearon la posibilidad de ir, y 5950 usuarios recibieron la invitación para asistir al evento. Un ejemplo de un buen funcionamiento de una página de Facebook de una asociación de comerciantes local son las de la
Zona Centro y su
Soho mensual, o
Calvario, o alguna otra más…
El ámbito de la fiesta
Otra de las curiosidades es saber el ámbito que tiene esta fiesta… ¿Teixugueiras, Navia, Vigo? Los mensajes lanzados desde la organización eran confusos, bien se dirigían a las comunidades de propietarios de Teixugueiras, a los vecinos de la misma calle, o bien a vecinos de Vigo y Galicia entera, ya que el objetivo final, a tenor de lo expresado en el artículo antes mencionado del Faro de Vigo, sería conseguir una fiesta tan importante como el
Arde Lucus. Este mensaje dirigido tan localmente hacia Teixugueiras en varios mensajes despertó recelos entre algunos vecinos de Navia que se sentían excluidos de esta fiesta que se celebraba en su puerta y en lo que muchos de ellos siguen considerando la parte nueva de su barrio. Si el objetivo de la fiesta es traspasar fronteras, lo mejor es no crearlas en los mensajes que se difunden a la gente buscando su implicación en el proyecto. No obstante, vuelvo al principio y recuerdo que mi impresión personal es que esta fiesta pretendía ser el gran proyecto de la fiesta oficial del barrio y por eso dirigir los mensajes a un área de influencia concreta.
Si observamos la normativa que sirvió para que los artesanos y hosteleros que se instalaron en la fiesta supieran a qué atenerse encontramos que en la primera versión de dicho documento, un texto bastante plano redactado el 29 de agosto se explicaba al principio del mismo:
Preámbulo:
Las fiestas de Pau de Navia que se celebran durante el mes de septiembre es la expresión del esfuerzo de los empresarios de la zona para que nuestro barrio sea puntero en Vigo y referente en la ciudad.
El gran crecimiento que el barrio de Navia ha experimentado durante los últimos años hace necesaria la creación de un marco que regule los espacios para el establecimiento de estos puestos así como que, mejore, amplíe y garantice la participación en las fiestas de todos aquellos vecinos y comerciantes del Pau de Navia que así lo deseen.
Artículo 1. Objeto.
El objeto del presente reglamento es la regulación de los espacios públicos en la calle Pedra Seixa plaza durante la celebración de las fiestas del mes de septiembre.
Este documento se revisa y se vuelve a distribuir el 6 de septiembre, mejor formateado, con imagen corporativa de la asociación de comerciantes, con el mismo autor, y hay un pequeño cambio en la introducción:
Preámbulo:
La I Edición de la Fiesta Romana “Vicus Spacorum”, a desarrollar en el Pau de Navia y la cual se celebrará durante el mes de Septiembre es la expresión del esfuerzo de los empresarios de la zona para que nuestro barrio sea puntero en Vigo y referente en la ciudad.
Parece una tontería, pero es un cambio notable, ya que pasan de ser las fiestas del PAU de Navia a ser una edición de una fiesta que se desarrolla en el PAU de Navia, lo que al final parece la redacción correcta. No entiendo bien qué tiene que ver el que el barrio haya crecido tanto el barrio con el marco de regulación. El marco de regulación de los puestos en una fiesta es independiente de lo que crece el barrio en el que se desarrolla. Salvo que se celebrara antes y de repente no haya sitio y haya que reubicar los puestos y crear un marco, pero bueno, esto son «razonamientos en voz alta» míos, pero es que entre los dos documentos es curiosamente la diferencia más importante, aparte de la estética del documento, porque las otras variaciones son mínimas, incluyendo el cambio de fecha de cobro que se adelantó del 23 al 22.
¿Vicus Spacorum?
No es descabellado creer que lo que comentan algunos expertos que dan por cierto que estemos habitando sobre los
restos del Vicus Heleni, sea más complejo ahora de asimilar que lo que ya damos por hecho, como si ahora nos dijeran que en Santiago de Compostela no descansan los restos del apóstol Santiago el Mayor, pero a estas alturas a ver quién va a discutirlo, comprobarlo y con qué razones o fines. 🙂
Lo que ha quedado claro es que desde la celebración de la fiesta, las apariciones de Vicus Spacorum que hacen referencia a Vigo y a razón de la Fiesta Romana, han crecido exponencialmente hasta ser la mayor parte de los primeros resultados que uno se encuentra en un buscador al intentar documentarse sobre el tema en cuestión. Fuera de toda duda, en todo caso, nuestro barrio no destaca especialmente por incluir ningún vestigio o resto romano alrededor del cual se pudiera desarrollar la actividad con un cierto sentido de valor propio o argumento histórico otro que el buscar un motivo para ambientar una fiesta local.
La ambientación de la fiesta romana
Cuando aparecieron las primeras informaciones, de los primeros documentos en aparecer fueron las normas a cumplir para los puestos solicitantes y además de las restricciones de venta de productos de artesanía, la obligación que se les impuso era la de ir ataviados con vestimentas romanas o celtas para que se ambientara el espacio y los actores. Pero esto sólo fue una pequeña ilusión, sobre todo para que lo de que era una fiesta romana se justificara como tal, porque llegado el momento de la celebración, se incorporó a la fiesta un Disc-Jockey animador que estuvo ambientando musicalmente la mañana y la tarde, y también un excelente e imponente escenario con su correspondiente orquesta de actualidad. No podíamos creer lo que veíamos… ¿Una fiesta romana con DJ y orquesta? En fin… quizás deberían haberse creado dos ambientes, uno de mercado o ciudad romana con los puntos de venta y algo de animación y otro para la fiesta en sí, sin restricciones, sin romper esquemas… quizás el año que viene haya nuevas instalaciones y podamos ver algo más que un fuerte romano que casi nadie pudo visitar por lo restringido de su horario, y podamos disfrutar de esas prometidas recreaciones de batallas épicas, o de otros históricos momentos que rodearon los primeros siglos de nuestro tiempo y que tan bien se publicitaban en la documentación de la fiesta que había en la web de comerciantes y en el artículo del Faro de Vigo que se mencionó anteriormente.
Al menos se tuvo el detalle de organizar unas actividades, tampoco suficientemente publicitadas, para los chavales que pudieron disfrutar en el parque de unos juegos y paseos.
Porque casi todo en el PAU de Navia funciona
Es evidente que lo que se organiza en este barrio funciona. La vecindad apoya ampliamente toda actividad que se organiza y estoy seguro que muchos verán en esta publicación un grano molesto, porque me gusta ser crítico, y porque creo que las críticas siempre sirven para mejorar.
Y a veces las críticas constructivas no llegan a nada. Un ejemplo claro es mi aviso al presidente de que no tenían dada de alta la base de datos en la Agencia de Protección de Datos, lo cual puede suponer una multa mínima de 900 euros. No debió parecerle importante porque después del concurso de tartas donde ya les advertí que hacer una captación de datos personales como nombres y teléfonos de los participantes, cuya lista acabó tal cual en una caja de basura y que yo mismo al advertirle de que eso era grave él mismo la cogió y la guardó para destruirla posteriormente, sin indicarles los fines o quienes iban a tener acceso a dichos datos era algo que les podría traer problemas. Lo mismo le has pasado durante esta fiesta en la que han publicado los nombres particulares de los solicitantes de los puestos y tal cual los publicaron en la web indicando las ubicaciones, y aunque en este caso es posible que se trate de los nombres particulares de profesionales o autónomos, en cuyo caso no están sujetos a la ley, es posible que alguno sea particular. del mismo modo también se colocó un formulario de captación de voluntarios y colaboradores cuyos datos personales no se indicaba los fines, la forma de contactar con el responsable del tratamiento ni nada. Cosas que cuestan poco o nada, pero marcan una diferencia la diferencia entre hacer las cosas bien o no. No seré yo quien denuncie nada de esto ante la Agencia de Protección de Datos, pero algún día alguien con mala leche podría hacerlo y por una tontería de nada podrían llevar un varapalo.
A esta fiesta le tengo un «especial cariño» porque me consta que parte de la destrucción que se ha promovido dentro de la asociación de vecinos, en la que me encontraba intentando defender temas vecinales, viene justificada por tres razones importantes, y una de ellas era la oposición que algunos directivos mostrábamos a que dicha fiesta de comerciantes pudiera ser financiada como «fiesta del barrio» desde la asociación de vecinos ya que lo que comentábamos es que, de haber una fiesta, deberían ser los vecinos los que se pronunciaran tanto sobre la fecha de celebración como sobre el patrono, santo, o motivo de la misma. Yo mismo propuse que ya que tenemos a la Escuela de Arte Dramático, el barrio ha sido propuesto como ubicación de la Biblioteca y de la Escuela de Danza, y que somos un barrio joven, una posible fiesta podría haber sido una fiesta de ámbito artístico y cultural en todo el entorno del barrio, aprovechando los numerosos espacios que hay en el parque y entre edificios. No pretendía, desde luego como parece en el caso de la fiesta romana, convertirse en la fiesta oficial del barrio, pero sí que hay opciones a estudiar otras alternativas que se puedan proponer para aprovechar esa partida presupuestaria, sin que ello impida que los comerciantes realicen sus propias fiestas, pero no gastando en ellas los fondos que pudiera haber para disposición vecinal con fines de fiestas populares.
Del mismo modo hay espacio para hacer una fiesta más infantil o juvenil puesto que estadísticamente demostramos que nuestro barrio es un polo de explosión demográfica, con el mayor índice de niños por metro cuadrado de Galicia y posiblemente de las primeras del resto de la península, y con este panorama no sería descabellado una gran fiesta infantil por todo el PAU para que niños pequeños, jóvenes y, cómo no, también nosotros los padres, podamos participar de eventos y actividades varias, sin tener que restringirse estrictamente a ser sólo público o sólo portadores de un disfraz, sino también a dinamizar colaborando en equipos o disfrutando en los numerosos espacios aún sin edificar de múltiples ofertas de ocio durante un fin de semana o varios.
Sólo deseo que el problema que actualmente tiene bloqueada la Asociación de Vecinos de Novo Vigo, surgido tras las diferencias entre los vecinos-comerciantes y los simples vecinos presentes en la asociación de vecinos, consiga superar las barreras que se le han puesto y pueda ponerse a trabajar y a demostrar que algunos no estamos involucrados con las cosas por obtener beneficios o pagar tasas sino porque nos gusta desarrollar el vecindario, la convivencia, y generar una dinámica entre nuestros jóvenes para que se integren en el futuro de este barrio.
Porque el dinero que partía del ayuntamiento para destinarse a la «fiesta patronal» del barrio no estaba claro cuanto podía ser, pero mientras en algunos momentos el presidente de los comerciantes comentaba a algún vecino en privado que hubieran sido hasta 20.000 euros con el beneplácito apoyo de la asociación de vecinos, finalmente la gestión directa de la asociación de comerciantes en la fiesta parece que obtuvo un compromiso del Concello de aportar 9.000 euros para este evento que no sé si a estas alturas lo habrán cobrado, pero que han tenido que anticipar los comerciantes para cubrir los gastos de la misma, siendo quizás el más alto de ellos la orquesta, aunque no sé -pero sí lo espero- que algún día las cuentas de este tipo de fiestas sean públicas para que sepamos que este tipo de fiestas cuestan más de lo que parece, y así conseguir una mayor implicación de la vecindad en el apoyo a las mismas. Y que si mañana o cuando sea, los comerciantes, o las asociaciones de vecinos, o las asociaciones culturales, o las comisiones de fiestas que surjan para organizar un evento similar en el barrio obtengan similar o superior apoyo económico.
La verdad es que se nota la buena sintonía entre la asociación de comerciantes y el Concello ya que, mientras lo habitual en cualquier organización de un evento en vía pública precisa solicitar los permisos con al menos 15 días de antelación, presentar avales o fianzas y tenerlo todo bien cubierto con suficiente tiempo, apenas a 48 horas del inicio de la fiesta aún no había autorización ya que no se depositó la fianza de creo que unos 2000 euros que se exigía, pero no hubo problema en que la correspondiente tramitación en el departamento correspondiente del Concello se gestionaran en el plazo récord de 48 horas y justo el día antes de la fiesta se había condonado la fianza desde instancias superiores con el argumento de que era una asociación nueva, sin recursos y sin ánimo de lucro. Quiero suponer que ese detalle pudo ser el que justificó ver carteles del Concello de Vigo por todos los puestos. Esperemos que a quienes en algún momento tengamos interés en organizar algo en nuestro barrio para la diversión pública también podamos tener esas facilidades.
Antonio Saá